Antes de iniciar, recuerda siempre manipular tu copa con las manos y las uñas MUY limpias.
Para esterilizarla debes usar agua potable. Puedes hacerlo en una olla que preferiblemente no sea de aluminio/teflón o en un recipiente apto para el microondas. Las ollas esmaltadas y de acero son ideales. Si no cuentas con esta opción, busca que el recipiente sea usado únicamente para esterilizar tu copa.
En el recipiente/olla debes poner suficiente agua para cubrir la copa por completo. Sin embargo, aún no sumerjas la copa, hierve el agua sola, para el microondas puedes ponerle de 2 a 3 minutos dependiendo de la intensidad.
Una vez esté bullendo, introduce tu copa y contabiliza 5 minutos.
Retira la copa del recipiente/olla y déjala secar antes de introducirla en su bolsita. Si la vas a usar, no olvides esperar a que enfríe o ponerla en agua fría para no quemarte.
¡Listo! ya puedes empezar a usar tu copita con toda confianza 🙂